DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL SÉPTIMO DÍAContenidos - Contents EL DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL SÉPTIMO DÍA
Hija de Eliam y esposa de Urías, un soldado heteo en el ejército del rey David. Atraído por su belleza, cometió adulterio con ella durante la ausencia del esposo, con lo que quedó embarazada. Como el rey David fracasó en su esfuerzo por conseguir que Urías visitara su hogar como para que creyese que el hijo era suyo, David hizo exponer a su fiel soldado para que fuera muerto durante el sitio de Rabá. Después del acostumbrado período de duelo, se casó con Betsabé; el 1er hijo murió y el 2º fue el rey Salomón (2 S. 11:1-12:24). Una vez se la llama Bet-súa,* hija de Amiel (1 Cr. 3:5). El nombre Amiel contiene los componentes de Eliam en orden inverso. Cuando Adonías estuvo a punto de asumir el trono real (1 R. 1:11-31), Betsabé, aconsejada por el profeta Natán, indujo al rey a coronar de inmediato a su hijo Salomón. Más tarde trató de obtener el consentimiento de su hijo para que Adonías se casara con Abisag, la criada de David. Sus esfuerzos fracasaron, y por causa del pedido, considerado como pretensión al trono, Adonías perdió su vida (2:13-25). De acuerdo con 1 Cr. 3:5, Betsabé tuvo 3 hijos, además de Salomón: Simea, Sobab y Natán (cf 2 S. 5:14; 1 Cr. 14:4). Betsabé está incluida en la genealogía de Cristo que da Mateo: "La que fue mujer de Urías" (Mt. 1:6). Lugar sobre el Mar de Galilea (Mr. 6:45), el pueblo natal de los apóstoles Felipe, Andrés y Simón Pedro (Jn. 1:44; 12:21), y donde fue sanado un ciego (Mr. 8:22-26). Jesús denunció a la ciudad, junto con Corazín y Capernaum, por la dureza de su corazón y su incredulidad (Mt. 11:21-23). El lugar había sido reconstruido y elevado al nivel de ciudad (Jn. 1:44) por el tetrarca Herodes Felipe, quien la llamó Betsaida Julia en honor de la hija del emperador Augusto. No lejos de Betsaida estaba el desierto donde Jesús alimentó a los 5.000 con 5 panes y 2 peces (Mr. 6:31-44; Jn. 6:1-15). Probablemente la ciudad se encontraba cerca de la desembocadura del Jordán, ya sea en la orilla noreste del Mar de Galilea (en el-{Araj) o a unos 3 km al norte (en et-Tell). Avi-Yonah considera que fueron ciudades gemelas: las ruinas de el- {Araj representan a Betsaida, y las de et-Tell a Julia. Algunos eruditos sostienen que existieron 2 Betsaida: Betsaida de Galilea (cerca de la costa al oeste del Mar de Galilea) y Betsaida Julia (en el extremo nororiental de dicho lago). Mapa XVI, C-4. Bib.: M. Avi-Yonah IDB I: 396, 397. 80. tradicional sitio de Betsaida, sobre el Mar de Galilea. Ciudad importante donde se une el valle de Jezreel con el del Jordán (1 S. 31:10, 12; 2 S. 21:12). Muy probablemente sea otro nombre para bet-seán.* 166 Antigua ciudad fortificada de los cananeos en el extremo oriental de la llanura de Esdraelón, sobre el río J~lãd, cerca del Jordán. Ocupaba una posición estratégica sobre el camino principal a Damasco, razón por la que los egipcios la consideraron por siglos como una ciudad clave para su imperio asiático. Bet-seán no fue ocupada por los hebreos en tiempos de Josué (Jue. 1:27), y, al dividirse la tierra, la ciudad fue asignada a Manasés, aunque estaba en el territorio de Isacar y de Aser (Jos. 17:11). Cuando el rey Saúl murió la ocupaban los filisteos, quienes, después de la batalla de Gilboa, colgaron en ella al rey y a sus hijos (1 S. 31:10, 12; 2 S. 21:12). Parece que David la ocupó, porque perteneció al reino de Salomón. Este la puso bajo la administración de Baana, cuya residencia era Meguido (1 R. 4:12). El faraón Sisac* menciona Bet-seán como una de las ciudades que conquistó durante su campaña palestina (cf 1 R. 14:25, 26). Después de un silencio de muchos siglos, Bet-seán aparece otra vez en la historia en el s III a.C., conquistada por Antíoco III (218 a.C.). En el 107 a.C. cayó otra vez en manos de los judíos, y permaneció brevemente bajo el control de éstos; entretanto, su nombre había cambiado por Escitópolis. Cuando Pompeyo la convirtió en ciudad libre (63 a.C.), la unió a las ciudades de la Decápolis. La aldea moderna de Beisân ha conservado su antiguo nombre. El sitio original, uno de los más notables de Palestina, lleva el nombre de Tell el-2utsn. Mapa VI, C-4. 81. Montículo en ruinas de Tell el-2utsn, sitio de la Bet-seán antigua. Una expedición de la Universidad de Pensilvania excavó las ruinas desde 1921 hasta 1933 y descubrió 18 niveles de ocupación. Se encontró que la ciudad ya estaba bajo la influencia egipcia a comienzos del 2º milenio a.C., y fue una poderosa ciudad-reino durante el período hicso. Las excavaciones también revelaron que después de la conquista de Bet-seán por Tutmosis III, permaneció en posesión de los egipcios como una guarnición militar durante 3 siglos. Durante ese período se construyeron 2 templos sobre los fundamentos de templos anteriores: uno para Astarté-Anat y el otro para Mekal-Reshef. De esa época datarían también varias estelas egipcias monumentales, 2 de las cuales fueron erigidas por Seti I y la otra por Ramsés II, más una estatua de Ramsés III, descubierta entre las ruinas por la expedición (figs 459, 460). También se descubrieron muchos objetos que arrojan luz sobre los ritos del culto pagano de los cananeos, particularmente el de las serpientes. Bib.: FJ-AJ xiii.10.3; F. James, N. Tzori D. Bahat, EAEHL I:207-229. 1. Antigua ciudad cananea en la Sefela,* a unos 24 km al oeste de Jerusalén en el valle de Sorec, sobre la carretera a Asdod. Fue asignada a Judá (Jos. 15:10) para los sacerdotes (21:16). Estaba en el límite entre Judá y Dan, y también se la llamó Ir-semes* (19:41). Se señala al "monte de Heres" (Jue. 1:35) como el asiento de esta ciudad. Probablemente no fue ocupado por los hebreos hasta varios siglos más tarde, pero no se sabe el tiempo exacto en que esto ocurrió. Parece que la poseyeron en tiempos de Samuel, porque el arca del pacto, que los filisteos habían capturado, fue devuelta a Bet-semes, donde permaneció hasta que fue llevada a Quiriat-jearim (1 S. 6). Bet-semes fue el escenario de una batalla en la que Joás de Israel apresó a Amasías de Judá (2 R. 14:1-14). Los filisteos la ocuparon en tiempos de Acaz (2 Cr. 28:18). Se identifica el sitio con Tell er-Rumeileh, cerca de {Ain Shems, que todavía lleva el nombre antiguo. Mapa VI, E-2. El Fondo para la Exploración de Palestina llevó a cabo excavaciones bajo la dirección de Duncan Mackenzie en 1911-1912, y más tarde lo hizo Elihu Grant para el Haverford College (1928-1933). Se descubrieron 6 niveles de ocupación. El nivel VI, el más antiguo, contenía trozos de tiestos del tiempo anterior a los hicsos (2200-1700 a.C.). El nivel V representa la ciudad de los hicsos, que habría sido destruida en el s XVI a.C. durante una campaña de Amenhotep I o Tutmosis I. Los restos encontrados en el siguiente nivel, el IV, muestran que la ciudad cananea experimentó su período más próspero desde el 1500 hasta el 1200 a.C., pero que fue destruida a mediados 167 de este periodo, tal vez por los hebreos (c 1350 a.C.). Los niveles III (1200-1000 a.C.) y II (1000-586 a.C.), que se deben asignar a la ocupación israelita, muestran que Bet-semes era una ciudad pobre, sin fortificaciones. El sitio no se volvió a ocupar después del exilio hasta el período helenístico, cuando se estableció en el lugar una comunidad pequeña (nivel I). 82. Montículo de la Bet-semes antigua. Entre los descubrimientos más interesantes realizados en Bet-semes están: a. Una tableta de arcilla inscripta con signos cuneiformes ugaríticos en orden inverso, de modo que sólo podía ser descifrada con la ayuda de un espejo. b. Un óstracon, o trozo de cerámica o tiesto, con una inscripción en escritura proto-semítica, aproximadamente de mediados del 2º milenio a.C. Bib.: G. E. Wright, EAEHL I:248-253. 2. Pueblo en el territorio de Neftalí cerca de Bet-anat (Jos. 19:38; Jue. 1:33); aún sin identificar. 3. Ciudad en la parte oriental de la llanura de Esdraelón o cerca de ella (Jos. 19:22). Se la ha identificado con el-{Abeidiyeh, cerca de Bet-seán. 4. Centro de adoración al sol en Egipto (Jer. 43:13); probablemente Heliópolis (la On* bíblica). Pueblo cerca de Zerera, en el valle del Jordán, donde los madianitas huyeron de Gedeón (Jue. 7:22); no identificado. Otro nombre para Betsabé* (1 Cr. 3:5). Bet-súa parece una mala lectura de Betsabé, probablemente producida al borrarse parte de sus letras hebreas. Ciudad cananea asignada a Judá y habitada por descendientes de Caleb (Jos. 15:58; 1 Cr. 2:45; cf v 42). Roboam la fortificó (2 Cr. 11:5, 7), y después del exilio fue el centro de un distrito (Neh. 3:16). Desempeñó un papel importante en las guerras macabeas: allí Judas obtuvo una gran victoria sobre el general sirio Lisias (1 Mac. 4:29; 2 Mac. 11:5; 13:19, 22), y más tarde la fortificó (1 Mac. 4:61; 6:7, 26). Luego la tomó Antíoco V Eupator (6:49, 50), y después fue fortificada por los sirios bajo Báquides (9:52) pero reconquistada por los judíos bajo Simeón Macabeo (11:65, 66; 14:7). 83. Montículo de la Bet-sur antigua, visto desde el norte. El nombre ancestral se ha conservado en Beit Tsûr, a unos 6,5 km al norte de Hebrón, pero el sitio exacto de la antigua Bet-sur se encuentra en Khirbet et-Tubeiqah, a unos 5,5 km al noroeste de Hebrón. Las excavaciones realizadas en 1931 y en 1957 confirman la historia de la ciudad como la describen los anales literarios. También muestran que ya era un pueblo importante en el s XVIII a.C. Mapa VI, E-3. Bib.: R.W.Funk, EAEHL I: 263-267. Pueblo en la región montañosa de Judá (Jos. 15:35), identificado con Taffû1, a unos 6, 5 km al oeste de Hebrón. 1. Hijo de Nacor y su esposa Milca. Era sobrino de Abrahán, y padre de labán y de Rebeca (Gn. 22:20, 22, 23; 24:15, 24,29; 25:20; 28:2, 5). 2. Lugar en la región sur de Judá perteneciente a los simeonitas (1 Cr. 4:30), llamado Betul* en Jos. 19:4. Fue posiblemente a este lugar donde David envió parte del botín capturado de los amalecitas después que ellos hubieron saqueado Siclag (1 S. 30:27; la forma Bet-el en este pasaje se puede deber a la pérdida de una letra w en el nombre). Es posible que el Quesil* de Jos. 15:30 sea otro nombre 168 del mismo lugar. El sitio no ha sido identificado. Véase Bet-el 3. Otro nombre para Betuel* 2 (Jos. 19:4). Nombre que sólo aparece en Is. 62:4 como nominativo simbólico para indicar la futura prosperidad de Jerusalén. La BJ lo traduce "desposada". Fundador de una familia de la cual 323 hombres regresaron de Babilonia con Zorobabel (Esd. 2:17; Neh. 7:23 (324)). Un representante de la familia puso su sello en el pacto de Nehemías (Neh. 10:18). 1. Descendiente de Judá, de la familia de Caleb (1 Cr. 2:20), que fue llamado por Dios para ser el principal artesano y artista de tabernáculo y su mobiliario (Ex. 31:1-11; 35:30-35; 2 Cr. 1:5). 2. Israelita, de la familia de Pahat-moab, que se había casado con una mujer extranjera en tiempos de Esdras (Esd. 10:30). 1. Pueblo gobernado por Adonibezek y capturado por Judá y Simeón durante la invasión de Canaán (Jue. 1:4, 5). El sitio no ha sido identificado, pero se ha sugerido Khirbet Bezqa, a unos 3 km al sudeste de Lida (Lod). 2. Lugar donde Saúl reunió a los israelitas antes de marchar en ayuda de Jabes de Galaad (1 S. 11:8). Hoy es Khirbet Ibzîq, a unos 19 km al noreste de Siquem. Mapa VI, D-3. Libro que contiene la colección de escritos sagrados aceptados como inspirados por Dios y con autoridad divina. Para los judíos, el término se refiere a la Biblia hebrea, que consistía de 24 libros y que ahora se agrupan en 39; para los cristianos se refiere a estos 39 más otra colección de 27 escritos (pero las versiones católicas, además de estos 66 libros, incluyen unos 12 escritos llamados apócrifos* por los protestantes). El texto válido para los protestantes es el formado por el AT hebreo y el NT griego; para la Iglesia Católica es la Vulgata, una traducción latina hecha por Jerónimo en el s IV d.C.; y para la Iglesia Ortodoxa Griega es la Septuaginta (LXX) más el NT griego. Como para el pueblo judío no existe la división en testamentos -hecho normal entre los cristianos-, pues sólo aceptan el AT, su término más común para "Biblia" es el vocablo heb. Tanak, un acróstico formado con las iniciales de Tôrâh ("Ley"), Nebîzîm ("Profetas") y Kethûbîm ("Escritos"); o sea, las partes en que se divide el texto hebreo. También usan otras frases o términos: Ha-Sefarim, "Los Libros"; Sifrei ha-Kodesh, "Libros Santos"; Kitvei ha-Kodesh, "Escritos Santos"; Ha-Ketuvim, "Las Escrituras"; Mikra, "Lectura"; Tôrâh, con la aplicación y el significado amplio de "Escrituras"; etc. 84. Página del Códice Vaticano, del s IV d.C., que contiene Lc. 7:14-38. 85. Página del Códice Sinaítico, del s IV d.C., que contiene Mr. 1:1-35. Para los cristianos, Biblia (una transliteración 169 del latín y el francés) proviene de gr. tá biblía "los libritos". En tiempos remotos el material más común para escribir era el papiro,* fabricado con un junco egipcio del mismo nombre y del que deriva nuestra palabra "papel". El nombre griego del papiro era búblos (más tarde bíblos), nombre que también se dio a la fabricación de material para escribir y a un rollo de papiro o libro.* La antigua ciudad fenicia de Biblos (la Gebal del AT) derivó su nombre del extenso comercio en estos materiales para la escritura. Biblia es realmente el plural del gr. biblíon (Lc. 4:17), la forma diminuta de bíblos (Mt. 1:1); de allí el significado de "libritos". Bíblos y biblíon se usan en la LXX en frases como "libros de la ley" (1 Mac. 1:56), los "libros" de los profetas (Dn. 9:2), "los libros sagrados" (1 Mac. 12:9) y en el prólogo de Sirac para la 3ª parte del canon hebreo del AT: "Los Escritos". Véanse la figs 249, 267, 314, 447. 86. Página del Códice Alejandrino, del s V d.C., que contiene Lc. 18:9-36. La manera corriente de designar los escritos sagrados en el NT es táis grafáis, "las Escrituras" (Mt. 21:42; 22:29; Lc. 24:32; Jn. 5:39; Hch. 17:2, 11; 18:24; etc.; lat. Scriptura). También se usa el singular he graƒe para designar la colección de Escrituras como un todo (Jn. 7:38; Ro. 4:3 etc.) pero aveces se refiere aun pasaje especifico (Lc. 4:21; etc.). Además de táis grafáis y he graf e aparece grafáis haguíais, "santas Escrituras" (Ro. 1:2); hiera grámmata, "escritos sagrados" (2 Ti. 3:15); ho nómos kaí hoi prof etai, "la ley y los profetas" (Mt. 7:12); to nómÇ . . . tóis prof etais. . . psalmóis, "la ley . . . los profetas . . . los salmos" (Lc. 24:44); ho ójlos, "la ley" (Jn. 12:34); y tá lóguia toú Theoú, los "oráculos de Dios" (Ro. 3:2, BJ; cf Hch. 7:38). El conjunto de libros que forman las Sagradas Escrituras se dividen en antiguo Testamento y Nuevo Testamento. Estas denominaciones se desprenden del argumento principal de sus escritos: el AT habla del antiguo "pacto" o "testamento" establecido por Dios con los hombres por medio de los patriarcas, el NT describe el nuevo "pacto" o "testamento" desarrollado en y por la persona de Jesucristo (2 Co. 3:14; He. 8:8; 9:15, 16). En el AT el nuevo "testamento" se anuncia y prefigura; en el NT, el antiguo "testamento" se cumple y amplía. 87. Primera página del Génesis de la primera Biblia impresa, la edición de Gutenberg, realizada entre 1450 y 1456. En la Biblia hebrea hay 3 divisiones: la Ley, los Profetas y los Escritos o Hagiógrafos. La Tôrâh estaba formada por los 5 libros de 170 Moisés (Gn., Ex., Lv., Nm. y Dt.). Los Nebîzîm, por 8 libros en 2 partes: 1. Los 4 libros de los Profetas Anteriores (Jos., Jue., S. y R.; 1-2 S. y 1-2 R. se tenían por 2 libros). 2. Los Profetas Posteriores (ls., Jer. y Ez.) y el Libro de los Doce (los Profetas Menores). Los Kethûbîm consistían en 11 libros: 1. Los 3 libros poéticos (Sal., Pr. y Job). 2. Los 5 rollos (Megillôth: Cnt., Rt., Lm., Ec. y Est.). 3. Dn. 4. Los 2 libros históricos (Esd.-Neh. y Cr.). Según otra forma de contarlos, tal como la de Josefo, el canon se componía de 22 libros. Para llegar a este número, posiblemente Rut se añadía a Jue., y Lm. a Jer. La LXX y la Vulgata no toman en cuenta la división en 3 partes de la Biblia hebrea, pero disponen los libros de acuerdo con el estilo literario que contienen: históricos, poéticos y proféticos. De estas versiones se deriva la disposición de los libros en nuestras Biblias. 88. Páginas del Nuevo Testamento de Tyndale. Los escritos del NT están distribuidos en 4 secciones: Evangelios (Mt., Mr., Lc. y Jn.), Hechos (Hch.), epístolas (Apostólicas: Ro., 1-2 Co., Gá., Ef., Fil., Col., 1-2 Ts., 1-2 Ti., Tit., Flm. y He.; Universales: Stg., 1-2 P., 1-2-3 Jn. y Jud.) y Apocalíptica (Ap.). De acuerdo con una compilación erudita, el NT contiene 433 citas directas del AT: 144 del Pentateuco, 148 de los Profetas y 141 de los Escritos. En el NT se citan explícitamente 30 de los 39 libros del AT (excepciones: 1 Cr., Esd., Neh., Est., Cnt, Lm., Abd., Nah. y Sof.). Sin embargo, el mero hecho de citar libros no es el tema de mayor importancia, sino la manera en que se citan: en 73 pasajes se usa la frase "Escrito está" para introducir declaraciones del AT; en 21 pasajes, tomados de 11 libros, se emplea el término "Escritura"; citas de 11 libros se atribuyen a Dios o al Espíritu Santo; en 46 textos se mencionan los nombres de 10 libros del AT o el de sus autores. Además, se puede decir que en ningún caso se cita algún libro apócrifo como si fuera "Escritura", ni se lo atribuye a la obra del Espíritu Santo. Bib.: FJ-AA i.8. La división actual en capítulos y versículos no procede de los autores de las libros, sino que fue adoptada de la Vulgata Latina. Las divisiones definitivas en capítulos se atribuyen a Stephen Langton (s. XIII d.C.; quizás en 1206); las de los versículos a Hugo de San Caro (1240 d.C.) y Roberto Estéfano (1551 y 1555 d.C.). La primera Biblia hebrea con texto dividido en capítulos y que usó la numeración actual fue la versión hebrea de Arias Montano, hecha en 1571 con una traducción interlineal latina. Si bien la división en versículos proviene desde el tiempo de los masoretas, su numeración sólo se encuentra desde el s XVI d.C. en adelante (los masoretas usaban los dos puntos (:), conocidos como sôf pasûq, para señalar el fin de los versículos). Los eruditos creen que la división en versículos comenzó con las porciones poéticas del AT. Para otras divisiones del AT entre los judíos, véase Antiguo Testamento. La Biblia, escrita por unos 40 autores humanos en un espacio de 1.500 años, es el resultado de una combinación misteriosa de lo divino y de lo humano (así como la mente humana es incapaz de explicar plenamente la encarnación, tampoco puede explicar plenamente la Biblia). Al escribir los diversos libros de la Biblia, la personalidad propia de los autores tenía libre juego, y su propio estilo y vocabulario se refleja en el producto terminado. Sin embargo, la Biblia es "inspirada por Dios" (2 Ti. 3:16, 17) y su autor real es Jesucristo. Aunque los hombres hablaron, lo hicieron siendo impulsados por el Espíritu Santo (2 P. 1:21). Por tanto, en un sentido especial, la Biblia es la Palabra de Dios. Los eruditos bíblicos liberales enfatizaron, durante casi un siglo, la diversidad de documentos en las Escrituras, pero en el pensamiento teológico actual hay, un renovado énfasis en la unidad esencial de la Biblia. El gran tema central, el principio, 171 unificador, es el plan de redención y la operación de ese plan en la historia humana. Pero dicha unidad no se debe interpretar como uniforrnidad. En los diversos libros de las Escrituras, el plan redentor se considera desde diversos ángulos y se pone el acento en aspectos variados. También ha habido un cambio en el pensamiento teológico reciente, que hoy pasa de las ideas a los eventos así como los presenta la Biblia. Aun se ha sugerido que deberíamos hablar de ella como de los "Hechos de Dios" en lugar de "la Palabra de Dios". Se observa que la Biblia es el relato de la historia de la redención (Heilsgeschichte), el informe de lo que Dios ha hecho, está haciendo y hará todavía para salvar a la humanidad, como también de las respuestas de los hombres a estos actos salvadores. Aunque hay mucho de cierto en este punto de vista, la Biblia es mucho más que esto. Los hechos salvadores de Dios también han sido interpretados, y estas interpretaciones participan de la naturaleza de la revelación divina precisamente porque son testigos, bajo el Espíritu Santo, del acto singular de Dios de su auto-revelación en Jesucristo. Así, el NT no sólo contiene el registro de los actos salvadores de Jesús en la historia, sino también la interpretación apostólica autorizada de esos eventos. Los actos salvadores de Dios tienen su centro en la muerte, la resurrección y el ministerio de Cristo; el significado de estos actos está aclarado en el testimonio apostólico del NT. Véanse Antiguo Testamento; Apócrifos; Apócrifos del AT; Apócrifos del NT; Canon; Inspiración; Materiales para escribir; Nuevo Testamento; Pentateuco; Seudoepigráricos. Padre del Seba que se rebeló contra David (2 S. 20:1); posiblemente un miembro de la familia de Bequer.* Oficial del ejército del rey Jehú de Israel (2 R. 9:25, 26). Véase Bondad. Frase que por lo general se usa para designar la parte inicial del Sermón del Monte de Jesús (Mt. 5:3-12; Lc. 6:20-23). La palabra griega de la que deriva es makários, que significa "dichoso", "feliz", "afortunado", "bendito" (en heb., 'ashrê). Las bienaventuranzas (de "buena aventura", "buen futuro") registradas por Mateo son bendiciones sobre quienes: 1. Reconocen su pobreza espiritual. 2. Lloran. 3. Son mansos. 4. Desean la justicia así como un hombre sediento y hambriento quiere agua y comida. 5. Son misericordiosos. 6. Son de "limpio corazón", cuyos pensamientos y motivos están dirigidos hacia el cielo. 7. Promueven la paz. 8. Son perseguidos y maltratados por causa de Cristo. (Lucas incluye sólo la 1ª, la 4ª, la 2ª y la 8ª, en ese orden.) En las bienaventuranzas Cristo anunció que los objetivos de su ministerio y de su reino eran traer la felicidad a la humanidad. Los principios enunciados destruyen el concepto de que la felicidad verdadera se encuentra en los niveles materiales o carnales. Eunuco del rey Asuero (Jerjes) cuando la reina Vasti fue llamada a la fiesta (Est. 1:10). Eunuco del rey Asuero (Jerjes) que conspiró contra la vida del rey (Est. 2:21; 6:2). 1. Jefe israelita que regresó con Zorobabel de Babilonia (Esd. 2:2; Neh. 7:7). 2. Fundador de una familia, de la cual 2.056 hombres regresaron con Zorobabel de Babilonia después del exilio (Esd. 2:14; Neh. 7:19 (2.067)); más tarde, otros 72 volvieron con Esdras (Esd. 8:14). Un representante de la familia puso su sello en el pacto de Nehemías (Neh. 10:16). Amigo de Job (Job 2:11; 8; 18; 25), llamado suhita. Algunos piensan que era descendiente de Súa, hijo de Abrahán (Gn. 25:2, 6), pero hay inscripciones que sugieren la posibilidad de que Bildad viniera de Shûhu, en la región del Eufrates medio. Bib.: W. F. Albright, AJSL 44 (1927-1928):31-36. Otro nombre para Ibleam* (1 Cr. 6:70). 1. Descendiente de Aarón y antecesor del 15º grupo o división de los sacerdotes (1 Cr. 24:1, 6, 14; Neh. 12:18). 2. Jefe de sacerdotes que regresó de Babilonia después del exilio (Neh. 12:5, 7); posiblemente 172 el nombre que represente a la familia de Bilga 1. Jefe de sacerdotes que puso su sello en el pacto de nehemías (Neh. 10:8). Habría pertenecido a la familia de Bilga 1 y/o quizá sea Bilga 2. 1. Criada de Raquel; llegó a ser concubina de Jacob y la madre de Dan y Neftalí (Gn. 29:29; 30:1-8; 1 Cr. 7:13). Rubén fornicó con ella (Gn. 35:22). 2. Pueblo en el territorio de Simeón (1 Cr. 4:29); generalmente se lo identifica con baala* (Jos. 15:29) y Bala* (19:3). 1. Horeo descendiente de Seir (Gn. 36:27; 1 Cr. 1:42). 2. Benjamita antepasado de varias familias (1 Cr. 7:10). Dirigente que retornó con Zorobabel de babilonia (Esd. 2:2; Neh. 7:7). Miembro de la tribu de Aser (1 Cr. 7:33). Descendiente de Saúl mediante su hijo Jonatán (1 Cr. 8:37; 9:43). 1. Israelita que se había casado con una mujer extranjera en tiempos de esdras y pertenecía a la familia de Pahat-moab (Esd. 10:30). 2. Israelita que se había casado con una mujer extranjera y pertenecía a la familia de Bani (Esd. 10:38). 3. Levita, hijo de Henadad, que construyó una sección del muro de Jerusalén en tiempos de Nehemías (Neh. 3:24; se ha conjeturado que el "Bavai"* del v 18 es este Binúi; los nombres son iguales en el hebreo sin vocales, excepto por la pérdida de una letra en Bavai). El también puso su sello en el pacto de Nehemías (Neh. 10:9), y probablemente fue su hijo uno de quienes recibieron el dinero y los tesoros que trajo Esdras desde Babilonia (Esd. 8:33). 4. Otro nombre para Bani* 4 (Neh. 7:15). 5. Levita que regresó con Zorobabel de Babilonia después del exilio (Neh. 12:8). Rey de Gomorra en tiempos de Abrahán, derrotado por Quedorlaomer y sus aliados (Gn. 14:2, 8, 10). Hijo de Malquiel, de Aser (1 Cr. 7:31); o, tal vez, un pueblo fundado por él, identificado con Bir-zeit, a unos 6,5 km al noroeste de Betel. Acusador de los judíos, persa o samaritano, en tiempos de Artajerjes (Esd. 4:7). Princesa egipcia que fue la esposa de Mered, un hombre de la tribu de Judá (1 Cr. 4:17). Si su nombre es hebreo, se puede tomar como un indicio de que habría aceptado la religión de su esposo (la forma, consonática significaría "hija (seguidora) de Yahweh" o "la que adora"). Sin embargo, el nombre puede ser una transliteración del egip. bityt, "reina", un término que en los textos egipcios se aplicaba a las diosas Hator, Isis y otras. Región costera al norte del Asia Menor. Linútaba al norte con el Mar Negro, al este con el Ponto, al sur con Galacia y Frigia, y al oeste con Misia y el Propontio. Los habitantes de Bitinia estaban emparentados con los tracios. En tiempos persas el país formaba una satrapía separada, pero en el período helenístico fue más o menos independiente. El último rey autóctono, Nicomedes III, legó su reino a los romanos (74 a.C.), quienes más tarde lo organizaron en una provincia y le añadieron el Ponto, de modo que la provincia se llamó Bitinia y Ponto. La capital de Bitinia era Nicomedia. Pablo esperaba hacer obra misionera en esa región, pero el Espíritu Santo no se lo permitió (Hch. 16:6, 7); sin embargo, en tiempos apostólicos se fundó una iglesia cristiana (1 P. 1:1). El gobernador más famoso de la provincia fue Plinio el Joven, quien nos cuenta que a comienzos del s II d.C. había muchos cristianos en su jurisdicción. Más tarde se realizaron importantes concilios eclesiásticos en las ciudades de nicea y Calcedonia, ambas en Bitinia. Mapa XX, A-4/5. Bib.: D. Magie, Roman Rule in Asia Minor (Gobierno romano en el Asia Menor) (Princeton, NJ, 1950), pp 302-320. Distrito o valle que iba desde el Jordán hasta Mahanaim (2 S. 2:29); aún no se lo ha identificado con certeza. Probablemente sea el lugar mencionado en las Cartas de Amarna* como Batruna. Como la palabra bithrôn también tiene el sentido de "mañana", los traductores 173 de la BJ adoptaron esta versión porque la consideraron más razonable después de la marcha de toda la noche que allí se menciona. Lugar en la región sur de Judá (Jos 15:28), si se sigue el texto masorético. La LXX dice "y sus aldeas"; la BJ, "y sus filiales" (heb. benôtêhâ, "sus hijas", "sus aldeas"). Eunuco de Jerjes (Est 1:10). 89. Un leptón emitido por Herodes Arquelao (4 a.C.-6 d.C). Sobre el anverso está la proa de un barco, y en el reverso lleva la inscripción ETHN, una abreviatura para etnarca: "Gobernador del pueblo". Unica moneda judía mencionada en la Biblia (Mr. 12:42; Lc. 12:59; 21:2). Era pequeña, de menor valor (1/2 cuadrante) y de cobre/bronce. Su peso oscilaba entre 0,5 y 1 g. Las 2 blancas que la viuda pobre echó en el arca fueron las monedas macabeas más pequeñas, o las leptá emitidas por los gobernadores de Judea. La fig 90 muestra un leptón acuñado por Poncio pilato en el año de la crucifixión de Jesús (30/31 d.C.). En el anverso aparece la vara de un augur (lituus), un símbolo religioso pagano, lo que muestra la ignorancia o la mala intención de Pilato con respecto a los sentimientos religiosos de los judíos. Véanse Moneda; Obolo. 90. Un leptón emitido por Poncio Pilato en el 30/31 d.C. Circuyendo un bastón de adivino se lee la inscripción "Tiberio César". Punto u objeto a que se dirige un tiro, una flecha y otra cosa que se lanza; objetivo. Es traducción del: 1. Heb. matarah o matará'. Señal o meta hacia la cual se tira una flecha (1 S. 20:20; Job 16:12; Lm. 3:12). 2. Heb. mifga'. Lo que se tiene "en la mira" o al cual se le dedica atención especial (Job 7:20). 3. Gr. skopós. Meta u objetivo por alcanzar (Fil. 3:14). Para blanquear paredes, por lo general se usaba un líquido formado por agua y una cierta cantidad de lejía o algo semejante. En la antigüedad la gente común no blanqueaba las paredes de sus casas como lo entendemos hoy, sencillamente las cubrían con argamasa o barro por dentro y por fuera; la de clase superior empleaba estuco blanco, o las pintaban. La palabra "blanquear", o sus equivalentes, aparece en la Biblia como traducción de los siguientes términos: 1. Heb. tafal, "cubrir (recubrir)", "embarrar (enlodar)". En Job 13:4, donde la RVR dice "Fraguadores de mentira", se usa esta palabra, y la oración se podría traducir: "Porque cubrís la verdad con mentira". 2. Heb. tajîm tâfêl, "dar una mano de blanqueo". La RVR traduce esta frase por "lodo suelto"; se refiere a blanquear algo de alguna manera, aunque la expresión hebrea no implica el blanco (Ez. 13:10, 11, 14, 15; 22:28). Otro término de esta familia: tîaj (Ez. 13:12). 3. Gr. koniáÇ, equivalente a la palabra española "blanqueo", se usa con este mismo sentido en escritos seculares. En uno de sus discursos, Jesús se refirió a ciertos sepulcros blanqueados, cuya apariencia exterior disimulaba la podredumbre de su contenido (Mt. 23:27). Pablo le dijo al sumo sacerdote Ananías que era una "pared blanqueada" (Hch. 23:3). La vestimenta sacerdotal, símbolo de santidad, servía para darle una apariencia de santidad a un corazón malvado. Término que denota un lenguaje difamatorio o injurioso hacia Dios. Sin embargo, los vocablos hebreos y griegos también se emplean con respecto a palabras y actos que atentan contra el honor, la honra y/o la fama de las personas. Tales frases o hechos abarcan las maledicencias, maldiciones, afrentas, calumnias, injurias, imprecaciones, etc. En la RVR generalmente se reserva este término para los casos en que se difaman el nombre o el carácter de Dios (Lv. 24:11; Stg. 2:7), ya sea en forma directa (Hch. 6:11) o implícita, como cuando se atribuyen evidencias del poder divino al diablo (Mt. 12:24) o se pretende la divinidad o las prerrogativas divinas (Mt. 9:1-6; 26:64-66; Jn. 10:33, 36). En la ley mosaica se castigaba la blasfemia con la lapidación (Lv. 24:11-16; cf Hch. 6:13; 7:56-59). No se perdona la blasfemia contra el Espíritu Santo (Mr. 3:28, 29). 174 Camarero de Herodes Agripa I, mediante quien ciertos enviados de Tiro y Sidón obtuvieron una audiencia con el rey (Hch. 12:20).
Disculpen las Molestias
Sri Garga-Samhita | Oraciones Selectas al Señor Supremo | Devotees Vaishnavas | Dandavat pranams - All glories to Srila Prabhupada | Hari Katha | Santos Católicos | JUDAISMO | Buddhism | El Mundo del ANTIGUO EGIPTO II | El Antiguo Egipto I | Archivo Cervantes | Sivananda Yoga | Neale Donald Walsch | SWAMIS jueves 11 de marzo de 2010ENCICLOPEDIA - INDICE | DEVOTOS FACEBOOK | EGIPTO - USUARIOS de FLICKR y PICASAWEBOtros Apartados
|
viernes, 31 de diciembre de 2010
Betsabé - Blasto. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL SÉPTIMO DÍA
Etiquetas:
adventistas
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Correo Vaishnava
Archivo del blog
-
►
2011
(102)
- ► septiembre (2)
-
▼
2010
(43)
-
▼
diciembre
(43)
- Boanerges - Buzi. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA D...
- Betsabé - Blasto. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA D...
- Bestia - Bet-rehob. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA...
- Bene-berac - Besor. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA...
- Beera - Bendito. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DE...
- Basalto - Beer. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL...
- Ballena - Basa,e. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA D...
- prueba
- Baara - Baluarte. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA D...
- Azbuc - Baana. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL ...
- Ayah - Azazías. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL...
- Atarot-sofán - Aya. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA...
- Astucia - Atarot-adar. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTI...
- Indice del Glosario del Diccionario Adventistas
- Asarela - Astrólogo. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTIST...
- Artemas - Asareel. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA ...
- Arod - Artajerjes. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA ...
- Arcturo o Arturo - Aro. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENT...
- Araña - Arco iris. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA ...
- Apolonia - Arán. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DE...
- Apócrifos - Apolión. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTIST...
- Antílope - Apocalipsis, Libro del. DICCIONARIO BÍB...
- Anem - Antiguo Testamento. DICCIONARIO BÍBLICO ADV...
- Amoz - Andrónico. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA D...
- Amiel - Amós, Libro de. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENT...
- Amana - Ami. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL SÉ...
- Áloe - Amán. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL SÉ...
- Alejandro - Almud. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA ...
- Ajat - Alejandrina. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA...
- Ahitob - Ajalón. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DE...
- Ahilud - Ahisar. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DE...
- Ahasbai - Ahiezer. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA ...
- Afeca - Aharhel. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DE...
- Admata - Afec. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL ...
- Adaías - Adma - DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL...
- Abrahán - Adaía. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DE...
- Aarón - Abraham. DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DE...
- Iglesia Adventista del Séptimo Día
- Adventista
- Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asiste...
- Ellen G. White - Adventistas
- Iglesia Adventista del Séptimo día Movimiento de R...
- DICCIONARIO BÍBLICO ADVENTISTA DEL SÉPTIMO DÍA
-
▼
diciembre
(43)
No hay comentarios:
Publicar un comentario